domingo, 9 de agosto de 2020

¿Resiliencia?

Siempre creí que las emociones o sentimientos negativos, se debían ocultar, porque a nadie debemos demostrarle que estamos mal ¿no?, pero a través del tiempo dejé de romantizar el significado de "estar bien" impuesto por esta cultura que siempre quiere tener el control, porque cuando me he sentido al limite, cuando he tocado fondo es cuando he descubierto cuanta fuerza he adquirido para salir de ese agujero donde me lleva la tristeza, el mal genio, la decepción, el miedo, la impotencia; personalmente me frustra tomar malas decisiones, pero y si no sucediera de esta forma, ¿Cómo he aprendido tanto en estos 25 años?.

Es cierto que el mundo se maneja por el que dirán, por cuantas cosas materiales tenemos, a parte si no tienes dinero, no comes, no duermes bajo un techo, no puedes mostrar en las redes que "estás súper bien", pero lo que jamás comprará el dinero o el significado de "éxito" es el equilibrio de tu salud emocional, entendamos que somos seres vinculares, que las enfermedades principales del mundo son generadas por una emoción o sentimiento no tratado de la manera correcta, por eso no minimicemos el buscar ayuda, el actuar cuando sientes que ya no puedes, no permitamos contestar, estoy bien, cuando nos preguntan ¿Cómo estás?, si en realidad no lo sentimos, tal vez la persona que esta al otro lado de la llamada o de la pantalla pueda ayudarnos a guiar en ese proceso para encontrar todas las respuestas que necesitamos para continuar.

Llorar nos hace sentir débiles, vulnerables, inseguros, por eso debemos estar siempre bien para mantener a salvo a los que amamos, pero ¿quién nos dio esa responsabilidad tan grande?, supiéramos el alivio que causa llorar, derrumbarse, tocar fondo, porque no esta mal que tus ataques de ansiedad, tus días grises terminen en lagrimas o suspiros llenos de angustia, esto quiere decir que necesitas reorganizarte, a veces aguantamos y aguantamos tanto, que al estallar no sabemos dónde estamos. Pero estos bajones o desequilibrios se dan en el momento exacto para cambiar de foco, para tomar otro camino hacia esa meta o sueño, te ayuda a moldear la manera en la que manejas el no tener el control, pero ¡cuidado!, todo tiene un límite, no esta mal estar mal, lo que no podemos permitir es quedarnos en la queja, en los días llenos de oscuridad, estos sentimientos y emociones al entenderlas y vivirlas, nos deben generar un estado de tranquilidad a tal punto de llenarnos de esas ganas que nos faltan para seguir.

Puede sonar masoquista, pero no lo es, así que conócete, siente, llora, grita, no salgas de la cama por el tiempo que creas prudente, pero promete por la garrita, que cuando te sientas un poco mejor, te vas a levantar, te vas a lavar la cara y vas a volver a luchar por ti, porque tu y tu salud emocional son lo único que importan, confío en ti.